Yo creo, sí creo.

Ahora me atrevo a sonreír; a mostrar mis dientes.
Y a llevar pantalones cortos; y enseñar piernas.
Y también a llorar; por qué ya no me siento débil.
Y por si fuera poco a levantar la mano en clase; por qué ya no me importa llamar la atención.
Y por supuesto a no esconderme; por qué ahora prefiero hacerme notar.
Y a imponer mi caracter; por qué soy fuerte.
A ser dura con los que me traicionaron; por qué se lo merecen.
Y a castigarlos; por qué también lo merecen.


 Yo creo, sí creo; pero esta vez no se trata de hadas.

[...] Sé tu misma.

No les gusto, lo percibo. ¿Acaso quiero hacerlo? Sí, puede que sí.
Por aquí no me quieren. A sus ojos soy imperfecta en todos los sentidos.
Espera. Olvido algo.
A sus ojos..¿y a los míos? ¿Que soy yo a los míos?
A mis ojos soy cómo quiero ser, sí.
¿Tanto valor les tengo como para querer cambiarme y así complacerles?
No, cambiarme no.
Debería ser lo que ellos quieren que sea, en vez de ser lo que soy.
'Debería'.

No.
Seré lo que soy.


[...]Seré yo misma.


 

No importa lo que digan.

Las miradas están centradas en mí, como siempre. Me miran, susurran. Como siempre. A traicion. Murmuran todo lo que no se atreven a decirme a la cara; lo que me callan y escupen más tarde a mis espaldas. El daño ya esta hecho. Empieza la guerrra. Pero...¿quién es el enemigo?
Yo misma.
Aunque, el único soldado que puede morir, seré yo misma.

Complejos, dudas, incomprensiones, estrés, desconfianza..
El enemigo es fuerte. Es decir que...¿soy fuerte? Lucho
contra mi misma, porque yo tengo las mejores armas.
¿Y la defensa? ¿Donde están mis armaduras y mis lanzas?

No.
'No matter what they say'

No importa lo que digan.